Que hacer, que ver y excursiones en Vigo y sus alrededores

Vigo es la ciudad más grande de Galicia, y tengo que decir que no deja de sorprenderme. Vigo es una metrópoli rebosante de actividad, verde, monumentos y rincones con encanto que te sorprenderán. Como resultado de esta nueva perspectiva, hoy voy a mostrarte un recorrido único por los lugares más sorprendentes y míticos de Vigo.

Qué ver en Vigo y alrededores en 15 lugares increíbles

Aquí tienes una lista de todos los lugares de interés que hay que ver en Vigo, España. Es un itinerario completo por la ciudad gallega pensado para ser completado en un día. Vigo tiene más de lo que parece, y puede llevarte varios días entre sus propios atractivos y los que se esconden en sus alrededores

1. El monte O Castro

El monte de O Castro, por tanto, fue el punto de partida ideal para nuestro recorrido por los principales atractivos de Vigo. Por su significado y belleza. Nos encontramos en el lugar que los fundadores de Vigo eligieron para establecer su ciudad; unas reliquias militares que datan del siglo III a.C. y que ofrecen unas vistas espectaculares de la ría de Vigo y de las Islas Cíes.
La Fortaleza de O Castro, las ruinas de una fortificación del siglo XVII construida para proteger Vigo contra los portugueses durante la guerra de independencia de Portugal y de España, corona la colina. Hoy son unos preciosos jardines con un estanque y murallas del siglo XVII que ofrecen quizá las vistas más espectaculares de todo Vigo.

Al descender, se puede ver el monumento a los Galeones de Rande, anclas y cañones recuperados de la flota española que zozobró frente a las costas de Vigo en 1702 en la Batalla de Rande. Si continuas hacia el centro histórico, te encontrarás con el edificio del ayuntamiento y el Castillo de San Sebastián.

2. Las playas de Vigo

La ciudad de Vigo cuenta con un gran número de atractivos, uno de los cuales son sus playas. La ciudad gallega cuenta con una gran variedad de playas urbanas, algunas de las cuales están un poco alejadas del centro histórico (se puede llegar en transporte público), pero todas ellas tienen algo único. En todas ellas encontrarás los elementos principales de cualquier playa gallega respetable: una preciosa arena dorada, un mar cristalino y una impresionante puesta de sol.
La belleza de esta zona se celebra en las mejores playas de Pontevedra y Galicia. Además de su diversidad, contribuye a su encanto. Tenemos desde diminutas bahías custodiadas por rocas hasta costas salvajes, dunas espectaculares y kilómetros de playas urbanas, todas ellas de una calidad inigualable. En Vigo hay diez playas con bandera azul, entre ellas la archiconocida Playa Rodas (islas Cíes), catalogada como una de las mejores del planeta, Figueiras (islas Cíes), A Punta (Teis) o Os Muiños de Fortiñón (Saiáns). Permítame, sin embargo, que me centre en tres en concreto.

La playa de Samil.

Es la más conocida de Vigo, y sirve como símbolo de la ciudad. Es una gran playa de mares transparentes y de arena magnífica. Cuenta con todos los servicios, restaurantes, pubs y hoteles que puedas necesitar.

La playa de O Vao.

Es otra de las mejores playas de Galicia. Casi un kilómetro de arena fina y aguas cálidas, que está bien resguardada del viento y conectada por un puente con la adyacente isla de Toralla.

La playa de Tombo do Gato.

Mi favorita de todas las playas de Vigo. Se trata de una encantadora cala de mar azul, que está rodeada de árboles. Es un lugar paradisíaco, pacífico y tranquilo. ¡La puesta de sol es impresionante!

3. El museo MARCO

El museo del MARCO es la muestra más evidente del reciente resurgimiento de Vigo. También refleja la transición de Vigo de ciudad industrial a metrópoli moderna, con una escena cultural y museística en ciernes. Aquí es donde esta galería de arte contemporáneo se hace presente. Fue construida en 2002 y desde entonces se convirtió en uno de los lugares más emblemáticos de Vigo.
Se encuentra en el emplazamiento de una antigua prisión y juzgado, que ahora alberga varias exposiciones temporales y donde todas las formas de arte son bienvenidas, incluyendo la moda, el vídeo, la arquitectura y las artes plásticas.

4. La plaza y el mercado de A Pedra

Otro de los lugares míticos de Vigo que hay que visitar es el mercado de A Pedra. Me refiero al mercado de A Pedra. En esta zona se nota la galleguidad. En la conocida como Plaza de la Asunción se encuentran una serie de marisquerías, pescaderías y restaurantes donde se puede comprar y comer el mejor producto de la ría de Vigo.
Aquí encuentras la famosa calle de las ostras de A Pedra, que es una oda al consumo de este manjar marino. El molusco es abierto y preparado por vendedores de ostras con delantales blancos y cuchillos en la mano. Sentarse en una mesa de la Rúa Pescaderia con un buen vino Albariño o Ribeiro es la mejor manera de disfrutarlo. No hay mejor Vigo que éste.

5. El Casco Vello de Vigo

Es una de las zonas más encantadoras de Vigo, un remanso de calles empedradas en el epicentro de la ciudad con una vibrante historia como ciudad industrial y región especializada con tintes marinos. El «Casco Vello de Vigo» no era recomendable para pasear hasta hace unos años, ya que era una zona degradada y desangelada. En los últimos años ha cambiado radicalmente, gracias a varias reformas importantes: ahora es una de las zonas más codiciadas de la ciudad, con algunos de los mejores monumentos y una plétora de restaurantes y bares.
Esta sección es de visita obligada. El mercado de A Pedra y la rúa da Pescaderia, donde hay que degustar las renombradas ostras de Vigo, son una visita obligada en cualquier itinerario que se precie. A continuación, podemos seguir subiendo por las estrechas callejuelas y recodos de la zona hasta la Plaza de la Iglesia. La concatedral de Vigo, situada frente a ella, es uno de los edificios eclesiásticos más notables de Vigo.
A continuación, llegarás a la bulliciosa Plaza de la Constitución. Este es el centro neurálgico del Casco Vello, donde los antiguos soportales que servían a varias tiendas se han convertido en bares y restaurantes aptos para tomar un vermut y un excelente pulpo a feira.
Merece la pena perderse por las callejuelas del centro histórico de Vigo y, sobre todo, empaparse de la historia y la cultura de la región. Aunque carece de monumentos espectaculares, arterias como la Rúa Palma, la Rúa Oliveira, la Rúa Alta, la Plaza Almeida, la Rúa Triunfo o la Rúa Funil son de una belleza innegable.

6. El pazo Quiñones de León

Dejamos atrás el centro histórico de Vigo y nos vamos a otro de los lugares más bonitos de la ciudad. Este artículo no ha hecho más que empezar, y empezamos a darnos cuenta de que la ciudad gallega tiene mucho más que ofrecer. El pazo Quiñones de León, antigua casa del Marqués de Valladares y Mos que actualmente uno de los mejores museos de Galicia, es sin duda uno de los detalles más elegantes.
Sin embargo, lo que destaca de este complejo palaciego son sus magníficos jardines. El jardín trasero del pazo fue transformado en un conjunto de árboles, setos y zonas ajardinadas en el siglo XIX por todos sus propietarios posteriores. En la actualidad, se puede visitar un moderno jardín inglés, un pequeño estanque con gansos y un laberíntico jardín francés. En este último se puede encontrar la camelia Matusalén, la más antigua de Galicia y una de las más antiguas de España.

7. El museo del Mar

Otra fascinante apuesta cultural que añadir a su itinerario por Vigo. Como sabes, el vínculo entre la ciudad gallega y el mar es largo y se remonta a cientos de años atrás. Fue por su cercanía al mar por lo que se estableció la ciudad y por lo que los romanos la transformaron en un motor industrial y comercial de la Hispalis romana años después. Hoy en día, la ciudad de Vigo es uno de los puertos más importantes de España y Europa.
El Museo del Mar, que se fundó para fomentar la investigación y el conocimiento promoviendo la historia marítima y pesquera de la ciudad y el íntimo vínculo entre los gallegos y el mar, tiene su origen en esta época. El Museo del Mar se encuentra en una antigua fábrica de pescado y matadero en la zona de Bouzas, que está cerca de la playa de Samil o de Tomba do Gato, de las que hemos hablado anteriormente.

8. Ensanche

Vigo es la ciudad más moderna de Galicia. El espectacular crecimiento económico y demográfico que se produjo durante los siglos XIX y XX cambió radicalmente el plan urbanístico de Vigo, dando lugar a la creación de nuevos barrios y zonas. El Ensanche fue uno de ellos. Aquellos conserveros y marineros que venían de Cataluña y los gallegos que habían emigrado previamente a otras naciones se convirtieron en burgueses cuando se convirtieron al capitalismo, y empezaron a instalarse en un nuevo barrio con distintos colores señoriales y elegantes.
La Puerta del Sol está situada en el extremo oriental de la ciudad, y es un gran espacio abierto con un hermoso monumento a la Sirena en su centro, que sirve de punto de encuentro entre esta nueva zona y el casco histórico de Vigo. Algunas estructuras, como la Casa de Correos y Telégrafos de Vigo en la Plaza de Compostela, el Teatro García Barbón, o la antigua sede del Banco Pastor, comienzan a sobresalir con un diseño rectilíneo y grandes vías racionales.
Tres de las calles más comerciales y transitadas de Vigo son Príncipe, Urzáiz y Gran Vía, mientras que en las vecinas calles Policarpo Sanz y Oporto y en la avenida García Barbón se puede ver una buena muestra de la arquitectura viguesa con hitos como la Fundación Barrié, la casa Odriozola, la sede de la AFundación (la residencia Yáñez o la Casa de las Artes), así como otros edificios.

Otra opción es la Alameda de la Plaza Compostela, que se encuentra en el corazón de Vigo y cuenta con un hermoso y frondoso bosque. En su perímetro hay hoteles de cuatro y cinco estrellas (como el Nagari o el Ciudad de Vigo), así como algunos restaurantes y pubs.

9. El barrio de Bouzas

Atravesamos la ciudad, desde una de las zonas más activas y concurridas de Vigo hasta otro lugar apacible y tranquilo, con tintes marinos y claramente relacionado con el mar. Me refiero a Bouzas, una villa encantadora e históricamente correcta que se unió a Vigo en 1904 cuando la ciudad creció tanto que se la tragó.
En este barrio no hay tiendas de renombre, franquicias o grandes almacenes, pero el comercio local persiste y el epicentro de la actividad sigue girando en torno al mercado de abastos de los domingos y a un mercadillo. El puerto está repleto de bares y tabernas donde se puede degustar la gastronomía gallega, su paseo marítimo con más de tres kilómetros de hermosas playas de arena, y el faro.

10. Las esculturas de Vigo

La cantidad de esculturas y estatuas que adornan las calles de Vigo es uno de los aspectos más destacables cuando se visita. A lo largo y ancho de la ciudad, encontrarás un montón de personajes famosos que han contribuido de forma significativa a la historia de Vigo, monumentos que conmemoran momentos cruciales de la historia de Vigo o que no sirven más que para adornar la ciudad. Para mí, las esculturas de Vigo son ya una parte importante de la identidad de la ciudad.
Hay muchos y están prácticamente en todas partes. Por lo general, puedes descubrir la mayoría de ellos paseando por la ciudad y admirando cada rincón de la calle y todo el tiempo que pasas en ella. Por ello, no voy a repasar todas las esculturas de la ciudad en este ensayo. Para el resto, he elegido cuatro piezas representativas.

El Nadador.

Son dos esculturas. Estas están situadas en la Plaza de la Estela, y fueron erigidas para conmemorar a todos los nadadores.

El Dinoseto.

La más conocida de las esculturas de la Plaza de Princesa es ésta, que representa un dinosaurio (dino) de pie sobre un arbusto (seto).

El monumento a Julio Verne.

Julio Verne aparece en los tentáculos de un enorme pulpo en el puerto de Vigo, un claro homenaje al libro de Julio Verne «20.000 leguas de viaje submarino». Este tema está estrechamente vinculado a Vigo: el autor lo trató ampliamente en su libro, e incluso lo visitó en dos ocasiones.

El Sireno.

Es un monumento muy conocido en Vigo, una de las esculturas más brillantes de la ciudad y, quizás, uno de sus lugares más emblemáticos. Simboliza una mezcla entre una persona y un pez en plena Porta do Sol.

5 lugares que ver en Vigo y alrededores

11. Las islas Cíes

Bienvenido a una de las zonas más bellas de Galicia las Islas Cíes son un excelente paraje natural escondido en la ría de Vigo. Las tres (o dos, en términos estrictos) islas de Faro y San Martiño están unidas por la playa de Rodas, formando el minúsculo archipiélago insular que forma parte del Parque Nacional Marítimo-Terrestre de las Islas Atlánticas. Ambas tres (o dos, en términos puristas) pueden verse.
Aquí descubrirás preciosas playas de arena que se asemejan a las más paradisíacas del Caribe: mares cristalinos de un color turquesa que nunca has visto, arena fina y dorada, y un fondo marino exquisito que no encontrará en ningún otro lugar. Si quieres recomendar una excursión, reserva el camping (el único alojamiento disponible) y pasa una noche en la isla. Un consejo, levantarse temprano para ver salir el sol sobre el Atlántico es muy recomendable.

12. Baiona

Es uno de los lugares más populares y visitados de Vigo y sus alrededores. Esta ciudad costera, que fue la primera de Europa en conocer el descubrimiento de América por Colón, combina algunos de mis componentes favoritos en un viaje: un pintoresco centro histórico con callejuelas empedradas, preciosas playas de arena con vistas a la bahía y un conjunto arquitectónico e histórico que desprende encanto.
Ahora bien, si me preguntas por mi plan ideal en Baiona, te diré que la mejor forma de resumirlo es el castillo de Monterreal y el santuario de la Virxe da Rocha. El primero es una magnífica fortaleza del siglo XVI convertida hoy en un lujoso Parador de Turismo, mientras que el segundo se construyó para servir de punto de referencia a los navegantes y ofrece una excepcional vista panorámica de la costa.

13. Tui

Llegamos ahora a la frontera con Portugal, concretamente a las orillas del río Miño, para descubrir otro de los pueblos más bonitos de Pontevedra. Estamos a unos treinta kilómetros del corazón de Vigo, pero el viaje merece la pena. Tui es una preciosa ciudad medieval con estructuras de cantería y muchos lugares y rincones que te enamorarán.
Merece la pena pasar un rato perdiéndose por sus callejuelas, conocer los restos de su judería y ver el patrimonio arquitectónico, repleto de iglesias, capillitas (San Telmo) y conventos (Convento de las Clarisas) que acaban desembocando en la magnífica catedral de Santa María de Tui, donde se encuentra uno de los mejores mosaicos románicos de Europa. Me gustaría terminar nuestro viaje a Tui en sus murallas, concretamente en el precioso paseo fluvial a orillas del Miño, frontera natural entre España y Portugal.
Te recomiendo que cruces la frontera hasta Valença si quieres quedarte más tiempo. La majestuosidad de los monumentos de la ciudad, así como su intrigante historia y su bella arquitectura, le han valido una reputación entre los turistas de todo el mundo. La belleza de las iglesias de Oporto es incomparable con la de cualquier otro lugar de Portugal o España. ¡Un verdadero paraíso! Además de compartir algunas características con su vecina española, esta metrópoli portuguesa hermanada con Tui tiene varios aspectos en común con Valença: sus magníficas fortificaciones, las pequeñas iglesias que hay por todas partes y la calma que invade sus calles. ¡Un oasis absoluto!

14. La isla de Ons

Una joya escondida frente a la costa de Vigo. Viajamos una vez más al Parque Nacional Marítimo-Terrestre de las Islas Atlánticas para explorar la isla más desconocida de toda España: Isla de Ons. Es la única isla habitada y, desde hace poco, ocupa un lugar entre los lugares más bellos del mundo. Sus playas de ensueño de mares transparentes e imágenes de postal son realmente únicas, habiendo reclamado su cuota de atención en los últimos años.
Hasta la década de 1940, este enclave estaba controlado por particulares. El gobierno del Estado, ajeno a su atractivo turístico, se apoderó de ella por razones estratégicas. Hoy es un remanso de calma en medio de la perfección, con unas vistas impresionantes, unas playas paradisíacas, unas puestas de sol espectaculares y unas caminatas por los acantilados de la isla. Es una visita obligada en Vigo.

15. San Simón y San Antón

Las islas de San Simón y San Antón son el lugar perfecto para unas vacaciones cerca de Vigo. Son dos islotes a menos de 25 kilómetros de la ciudad gallega que están unidos por un puente de piedra. Está rodeado de una historia de historias de piratas, caballeros templarios y batallas navales. Incluso se utilizó como cárcel durante el gobierno de Francisco Franco.
Durante el viaje, podrá explorar dos lugares encantadores, escuchar algunas de las leyendas y descubrir importantes lugares de interés. El mirador de Boca da Ria es mi favorito, pero hay otros: la capilla de San Simón, sus jardines, la Plaza de los Poetas o la Casa de los Cursos.

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